El Vestuario de una Reina

Detrás de los mantos, bordados y vestidos con los que se engalana la Imagen de la Virgen del Carmen, se esconde lo más precioso: el amor con que sus hijos quieren honrar a su Reina y Madre. 

A lo largo de las décadas se han ido sumando los regalos que personas e instituciones le han dedicado. Hoy, la Virgen cuenta con una pequeña colección de ajuares que se van combinando en los diversos momentos del año.

Está, por un lado, el manto llamado de "Coronación", que fue mandado a bordar por las camareras en 1896, y que se llamó así debido a que con él fue coronada la Sagrada Imagen en 1926. Está conformado por hojas de acanto y motivos florales en bordado de gran realce e hilos de plata, sobre raso francés. Fue restaurado en dos ocasiones.

El manto del "Cincuentenario" fue confeccionado con los bordados que le fueron obsequiados por los conventos de Claustro que la Imagen recorrió entre 1974-1975. Valiosos trabajos a mano que en muchos casos superan el siglo de antigüedad. En su confección y entrega efectuada en diciembre de 1976 con motivo de los cincuenta años de la Coronación, participaron los Centros de Madre de Santiago. Con él por muchos años se ha vestido a la Virgen en su Procesión por las calles de Santiago. Entre 2009-2011 fue totalmente trastelado y restaurado quitando todo aquello que el uso y el paso de los años había desmerecido ostensiblemente. 

El manto de "Los Escudos", fue donado por Monseñor Rafael Edwards Salas y su hermana en 1931, después de la Procesión en que la Virgen se mojara. Fue bordado por religiosas de clausura y porta los escudos chileno, pontificio, de Pío XI quien ordenó la coronación canónica, el de la ciudad de Santiago y el del arzobispo de la época de la coronación. 

En la actualidad se trabaja en la confección de un manto más para el uso diario, con el fin de reemplazar el que se perdió con el incendio de la Imagen en abril de 2008. 

Los vestidos o sayas de la Virgen están confeccionadas en terciopelo fino y con bordados en gran realce. Todos hermosos desde el punto de vista estético y con un arte singular. 

Las mantillas, en su mayoría, han sido donadas por damas de Santiago que luego de sus matrimonios tenían la costumbre de donar su Mantilla o Velo matrimonial a la Santa Imagen del Carmen. 

El Niño Jesús posee sus trajecitos y vestidos, así como una serie de zapatitos que conforman su ajuar, que el cariño y devoción han plasmado para el Niño - Rey. 

Las cabelleras de la Virgen y del niño Jesús están confeccionadas de pelo natural, siendo la última confeccionada con el pelo que fue donada con cariño y devoción por una joven que cortó su pelo, después del atentado incendiario que en 2008 sufriera la imagen.


Coronas y Joyas de una Reina

Las coronas de uso permanente están confeccionadas en bronce y piedras de fantasía. Fueron donadas por un religioso de la Orden Dominica hace ya muchos años. Además aún se conservan las antiguas coronas que fueron compradas por las camareras junto con el "manto de coronación" en 1896. (Las Coronas que ocupa habitualmente la Virgen son réplicas de las originales)

En ocasiones muy especiales la sagrada Imagen de la Virgen, luce las coronas de la FE, el AMOR y la GRATITUD de 1926. Fueron confeccionadas con las donaciones de joyas de particulares de todo Chile quienes las entregaron para fundirlas en esta muestra de amor que coronaría a Nuestra Madre y su Hijo, lo y constituyen una demostración inequívoca de la profunda devoción de los chilenos por la Virgen del Carmen. Son de una exquisita belleza y delicada orfebrería. Fueron cinceladas en el taller de don Antonio Callis y su modelo -con algunas modificaciones- corresponde al facsímil de la corona de la Reina María Teresa de Austria. 

En la de la Virgen destaca la cruz que se alza soberbia en el orbe de la misma y que fue la primera donación para la corona, realizada por Monseñor Rafael Edwards, desprendiéndose de su cruz pectoral de Obispo hecha con las joyas de su señora madre. Además destaca en la corona de la Virgen el precioso escudo nacional. La corona del Niño se distingue sólo por ser de menor tamaño, con el escudo pontificio en el centro, pero de igual belleza.


Monseñor Edwards observando el trabajo de los orfebres durante la confección de las coronas de la Virgen y el Niño
Revista Zig-Zag
Diciembre de 1926.

Corona de la Virgen del Carmen realizada con las donaciones de todos los chilenos, con motivo de su coronación pontificia.
Fotografía Nicolás Nadjar, 2010.
Cofradía Nacional del Carmen.

El Escapulario

Además de las coronas, las imágenes tienen un juego de escapularios para ocasiones especiales y otro para el uso diario. El que la imagen de la Virgen usa para las fiestas fue donado por una piadosa dama, doña Dulcesina Osorio para el día de su coronación y los del Niño Jesús fueron donados por Don Luis Moglia Magnasco, devoto y vestidor de la Imagen del Carmen por más de 40 años.

Tiene además algunos escapularios de mano de uso diario, siendo el más significativo el que se confeccionó especialmente para la mano de la Virgen, que perteneció a la Sra. María Mackenna de Errázuriz, quien presidió la Cofradía de las camareras por casi 20 años.


Las Reliquias

La Imagen tiene colgadas a su pecho dos reliquias de 1er grado de los santos Alberto Hurtado Cruchaga S.J y de Teresa de Jesús de los Andes O.C.D. Estas fueron donadas después de su re-entronización en su Santuario de la Parroquia El Sagrario.


Banda de Generala de las FF.AA

El amor de las FF.AA. a la Virgen del Carmen es histórico y viene desde la Independencia de nuestra historia como Nación libre y soberana. La banda de generala de las FF.AA. que porta la Imagen coronada cruzada al pecho, fue donada por el director de la Escuela Militar, Don Ricardo Lecaros, a la Virgen del Carmen en 1970. Las estrellas de plata que lleva prendidas a la banda fueron sacadas del Cofre cuajado de medallas que los veteranos de 1879 le donaron por las victorias conquistadas.


La Virgen del Carmen Peregrina junto a la boya de Iquique que indica el lugar donde se hundió la Esmeralda el 21 de mayo de 1879.
Fotografía Obispado Castrense.

La Fuerza Aérea en su iglesia institucional a la visita de la Virgen del Carmen Peregrina.
Fotografía de la Fuerza Aérea de Chile.

Pabellones de la Coronación Canónica

Para la coronación de la Virgen del Carmen, le fueron donados los pabellones de las naciones acreditadas en Chile como homenaje de las mismas. Dichas banderas están confeccionadas en raso y bordadas finamente. Ellas acompañan año a año escoltando el Anda de la Virgen del Carmen el día de la Oración por Chile.


Pila Bautismal de la Parroquia del Sagrario

Esta antigua pieza de bronce que se encuentra en uno de los pasillos laterales de la Parroquia, fue fundida en 1603, bajo el gobierno pastoral del entonces obispo, el franciscano Monseñor Juan Pérez de Espinoza. Entre los años 1603 y 1892, fueron bautizados en esta pila 88.200 personas. A comienzos del siglo XX fueron bautizadas unas 15.000 personas más.


Cruz de Roberto Matta

Adosada a uno de los muros del Santuario se encuentra esta magnífica obra en bronce del reconocido artista nacional Roberto Matta (1911, Santiago de Chile - 2002, Civitavecchia, Italia). Desde niño recibió formación cristiana en su familia y más tarde, en el Colegio de los Sagrados Corazones de Alameda. A fines de los años '70, residiendo en Civitavecchia, cerca de Roma, concibió esta obra que lleva por nombre "L'Alto il Basso la Sinistra la Destra del Cuore", ("Arriba, abajo, a la izquierda y a la derecha del corazón" haciendo referencia al gesto de persignarse). 

Interpretando los deseos de don Roberto Matta, después de fallecido su viuda, Germana Ferrari, donó la Cruz para que fuera ubicada en la Catedral de Santiago, en el lugar donde se venera a Nuestra Señora del Carmen.


Cristo de Marfil

Esta fina imagen tallada en marfil que se encuentra en la parte posterior de la Iglesia, y pende en un muro sobre un confesionario, fue donada por doña María Correa Alamos.


Sagrario

El lugar donde se conserva el Santísimo Cuerpo y Sangre del Señor, es de arte barroco latinoamericano, completamente tallado en madera, dorado a la hoja y donado hace años por una camarera para la Cofradía del Carmen en la época de la Basílica del Salvador. Es propiedad de la Cofradía Nacional.


Custodia

Es el objeto donde todos los miércoles del año se expone a la adoración pública el Santísimo Sacramento del Altar. Data de fines del Siglo XIX y es propiedad de la Cofradía Nacional. Es una pieza de la orfebrería francesa.


Cofre de las Medallas

"Con tu protección las hemos conquistado, a Ti las ofrecemos". 

Así reza el adagio tallado junto al escudo nacional de Chile, en el cofre que contiene dos cojines llenos de medallas, donadas por los veteranos de la Guerra del Pacífico. Dichas condecoraciones fueron donadas por los propios soldados antes de la coronación con el fin de ser fundidas para las coronas de la Virgen, pero Monseñor Edwards, Obispo castrense, pensó que mejor era conservarlas como testimonio del amor de los veteranos a su Reina, Madre y Generala Jurada.


Cofre que contiene las medallas regaladas por los veteranos de la Guerra del Pacífico a la Virgen del Carmen con motivo de su coronación.
Fotografía Cofradía Nacional del Carmen.